BOLIVIA LIBRE DE ILETRADOS EN 2008
Mario Hubert Garrido
(PL).- La declaratoria de Bolivia en 2008 como Territorio Libre de Analfabetismo, el tercer país de América Latina, después de Cuba (1961) y Venezuela (2005), constituye su mayor logro en políticas sociales.
El programa nacional, iniciado en marzo de 2006 en la oriental localidad de Camiri, el primero en la historia del país que tuvo una participación activa del Estado, llegó a los 327 municipios y a los nueve departamentos.
Según explicó a Prensa Latina el presidente Evo Morales, de esta manera se cumple uno de sus principales ejes programáticos, vitales para el proceso de cambio.
Llegar a enseñar a leer y a escribir a más de 823 mil personas, en su mayoría mujeres, agregó, es posible gracias a naciones solidarias como Cuba y Venezuela y a novedosos programas como el "Yo sí puedo".
Sin embargo, alertó sobre la importancia de otros planes como el de la post-alfabetizació
También estimó vitales políticas sociales como la entrega de un bono escolar a alumnos de primaria, una ayuda económica consistente en 200 bolivianos (unos 25 dólares) una vez al año para evitar la deserción escolar y que no surjan nuevos iletrados.
Morales, quien gusta de los símbolos en su lucha por la equidad social, ponderó la importancia de que en el mismo escenario donde se entregaron los primeros diplomas a alfabetizados, en junio de 2006 - Coliseo La Coronilla, de Cochabamba -, acogiera la proclamación al mundo de Bolivia como Territorio libre de iletrados.
Educación para todos
El ministro de Educación y Culturas, Roberto Aguilar, destacó la importancia de alcanzar la condición de nación libere de analfabetos para avanzar en otros programas como la educación alternativa para adultos y llegar hasta la comunidad más lejana del país.
Pese a que Educación como Defensa, explicó, son carteras que deben hacer sentir su influencia hasta el último espacio de la geografía boliviana, es el "Yo sí puedo" el que nos permite articularnos y llegar a los más humildes.
En nuestro país, agregó, los anteriores gobiernos de turno trataron junto a varias instituciones, entre ellas la Iglesia, de hacer un esfuerzo por erradicar ese mal social, pero sin los resultados esperados.
El problema del analfabetismo en Bolivia y en otras partes del orbe es más serio que los 800 millones de adultos iletrados, está en juego, en primer lugar, la dignidad de las personas, su autoestima su vínculo con el mercado laboral.
En ese contexto es que desde aquí vimos siempre con alegría que países como Cuba y Venezuela, desde el mismo triunfo de los respectivos procesos revolucionarios, asumieran la educación y la cultura en general como prioridades de sus políticas públicas, añadió.
Asimismo señaló que desde enero de
La alfabetizació
En todo este periodo, según Aguilar, una huella importante han dejado los colaboradores cubanos y venezolanos.
Todos ellos, dijo, alejados de sus más cercanos familiares, lejos de su tierra natal, entregan todo de sí para que Bolivia alcance esa meta.
Es la solidaridad que ellos impregnan, ese gesto de dar sin nada a cambio que identificó a las izquierdas a inicio de los años 60 en América Latina, que vemos renacer en la labor de todos estos cooperantes.
Misión trinacional
El cubano Javier Labrada es el coordinador nacional en Bolivia de los asesores cubanos y venezolanos del Programa Nacional de Alfabetizació
A su juicio, por primera vez en la historia de este tipo de cooperación se crea una misión trinacional, que la completan los alfabetizadores bolivianos así como sus autoridades a todos los niveles.
Para el éxito de este plan, considera que fue vital el apoyo desde el primer día del presidente Evo Morales.
"Es que Evo proviene de una familia pobre, del campo, que conoce las limitaciones y las necesidades del pueblo", precisa.
Otra fortaleza que nos deja este programa "Yo sí puedo" es la voluntad política que despierta en los gobiernos si verdaderamente aspiran al desarrollo nacional, agregó Labrada.
Mario Hubert Garrido - Corresponsal Jefe de Prensa Latina en Bolívia